En el camino del ashtanga yoga de los 8 peldaños, tal y como nos describe Patanjali, el 5º sería justo el tránsito de lo físico a lo mental, de lo externo a lo interno, de ir retirando los estímulos e información a nuestra mente, que se nutre de ellos (de los sentidos) con sus impresiones sensoriales que la dejan secuestrada porque siente apego por el mundo que espera encontrar fuera y nos pone un reto verdaderamente difícil, salir de ahí voluntaria y conscientemente.
Del mismo modo que para apagar un fuego se hace preciso retirar la madera y el combustible, para calmar nuestra mente, hemos de “cerrar las ventanas” por donde nos entra la información, cerrar los ojos, oídos, silenciar la voz, bajar el ruido interno y externo, suavizar las vibraciones……
Hoy día esto es casi misión imposible con nuestras ajetreadas vidas tecnológicas, sobre todo en grandes ciudades con la prisa y el estrés del ajetreo, y sin embargo por esto mismo se hace más necesario que nunca, parar, respirar y abstraernos de nuestros sentidos y sus estímulos.
Este es el 5º estadío, pratyahara que significa justo eso, reducir (prati) el alimento (ahara) que nutre nuestra psique. Los que practicáis yoga físico, hathayoga, sería justo el momento del relax cuando disfrutaríamos de este nutritivo peldaño.
